Las
afecciones respiratorias son enfermedades que comprometen a los pulmones y/o a
las vías respiratorias. Aprenda sobre algunas de ellas y cómo manejarlas
naturalmente.
BRONQUITIS
La bronquitis aguda es la tos profunda, húmeda o seca que
viene y se queda después de una infección, tal como el resfrío, sinusitis o la
gripe. La tos, que puede empezar seca y luego productiva, es la forma del
cuerpo de expulsar la mucosa infectada (flema) de los pulmones. Un episodio de
bronquitis puede durar una o dos semanas, y debido a que usualmente lo ocasiona
un virus, los antibióticos pueden no ser de ayuda. El mejor tratamiento suele
ser el descanso, combinado con terapias naturales que potencien su sistema
inmunológico, así como una terapia sintomática para calmar la tos y promover el
retiro de la mucosa.
La bronquitis crónica se desarrolla en la presencia
constante de irritantes, usualmente el humo del tabaco, pero también debido a
alergias ambientales (especialmente al polvo, polen, caspa animal o moho) y
clima húmedo con neblina; algunas veces resulta de alergias alimenticias. A
menudo comienza como un caso alargado de bronquitis aguda que vuelve cada pocos
meses. La condición debilitada de los pulmones deja al cuerpo vulnerable contra
infecciones. En su estado avanzado, incluso los resfríos menores pueden crecer
y convertirse en enfermedades mortales.
Síntomas
En caso de bronquitis aguda, presentará una tos que
puede empezar seca, pero que se vuelve profunda y productiva, con mucosa gruesa
o amarilla. Usualmente sigue a una infección viral.
Causas de origen
- Alérgenos alimenticios o ambientales, que ocasionan mucosa excesiva en los pulmones.
- También una infección viral.
- Irritantes ambientales.
- Clima frío, húmedo y con neblina.
ASMA
El asma es una enfermedad respiratoria seria que deja a sus víctimas literalmente sin aliento. Las personas con asma usualmente tienen una combinación de problemas en los pulmones: espasmos de los músculos bronquiales, hinchazón del revestimiento mucoso e incremento de la producción mucosa. Cuando una persona susceptible es expuesta a un detonante, tales como irritantes ambientales, alérgenos, gran esfuerzo físico, o incluso ansiedad, las vías se inflaman aún más y bloquean el paso libre del aire, resultando un ataque de asma. En caso de un ataque severo, si una persona no recibe atención médica puede sofocarse.
Síntomas
- Dificultad para respirar.
- Sibilancias (sonido agudo y silbante al respirar).
- Tos.
- Rigidez en el pecho.
- Pérdida de sueño debido a tos y vías respiratorias obstruidas.
- Ritmo cardiaco incrementado.
- Opresión de los músculos en las vías respiratorias.
- Inflamación del revestimiento de mucosa.
Causas de origen
Los detonantes que pueden ocasionar un ataque
varían de persona a persona, pero los más comunes incluyen:
- Alergias, ya sea ambiental o a alimentos
- Polución e irritantes.
- Infecciones (resfrío, gripe y otras infecciones respiratorias).
- Aire frío.
- Esfuerzo físico excesivo.
- Funcionamiento digestivo pobre.
- Desequilibrio hormonal.
- Estrés emocional.
ALIMENTACIÓN
Alimentos recomendados:
- Consuma alimentos que no promuevan la producción de mucosa: vegetales crudos y frutas, semillas, cereales integrales, carne magra de aves y pescado fresco.
- Los carotenoides son antioxidantes que tienen beneficios naturales antioxidantes y antiinflamatorios. Se encuentran en los vegetales de hojas oscuras y en los vegetales amarillos y naranjas. Las sopas de pollo caseras también diluyen la mucosa. Agregue ajos o jengibre para darle sabor y ayudar el sistema inmunológico.
- Un vaso de agua pura cada dos horas lo ayudará a mantener su sistema limpio e hidratado. El agua es especialmente de ayuda tras un ataque de asma para deshacer la mucosa. Para reducir la flema, tome un poco de sopa caliente de cebada.
- El propóleo, una sustancia elaborada por las abejas para proteger su colmena, es un producto natural que sirve para el tratamiento de gripe, sinusitis, laringitis, bronquitis, por su acción antiinflamatoria y anestésica.
- Los estudios muestran que los niños que comen pescado más de una vez a la semana tienen un tercio del riesgo de desarrollar asma.
- Los ajos y cebollas tienen propiedades antiinflamatorias y son una adición de sabor a sus platos de vegetales.
- Las semillas de lino son una excelente fuente de ácidos grasos omega-3 antiinflamatorios. Para los niños de más de cinco años de edad, use 1 a 2 cucharaditas, y para adultos, la dosis es de 1 a 2 cucharadas diarias.
Alimentos que debe evitar:
- Es crucial descubrir si ciertas comidas producen reacciones alérgicas.
- Elimine los alimentos que promuevan la producción de mucosa: lácteos, chocolate y plátanos, así como las comidas procesadas, refinadas, fritas y chatarra. Ellos promueven la producción de mucosa que tapa sus vías respiratorias. Por la misma razón, aléjese del azúcar, la comida chatarra, y alimentos fritos y refinados.
- Evite los azúcares simples ya que estos suprimen la función inmunológica.
- No consuma alimentos que contengan aditivos o preservantes. Esto significa evitar los alimentos procesados, secos, ahumados y barras de ensaladas, a las que a menudo rocían preservantes como la tartrazina (tinte amarillo número 5), colorante rojo y otros.
- Nunca coma comidas congeladas o extremadamente frías, ya que pueden ocasionar que los músculos en sus vías respiratorias se hagan rígidos.
- Mantenga su diafragma libre de presión consumiendo pequeñas comidas y evitando comidas que causen gases, como los granos y los vegetales crucíferos (brócoli, coliflor y coles de bruselas son los atacantes más comunes).
RECOMENDACIONES GENERALES
- Si usted tiene bronquitis, descanse, preferentemente en cama, mientras la enfermedad esté en su punto peor. Cuando se sienta mejor, muévase para evitar que la infección se establezca en sus pulmones, pero continúe descansando luego de periodos de actividad.
- No tome un supresor de tos. Los pulmones necesitan expulsar la flema para sanar, y los supresores evitan que lo hagan. El uso constante de supresores puede llevar a peores casos de bronquitis aguda o incluso de bronquitis crónica a neumonía.
- Promueva la expectoración aplicando compresas cálidas sobre su pecho.
- En caso de asma, un ejercicio suave a moderado incrementará su habilidad para tomar el oxígeno, así que realice una caminata diaria u otra actividad. El aire frío puede desencadenar un ataque, así que use una máscara sobre su rostro y boca durante los meses fríos o ejercite en los interiores.
- Realice ejercicios de respiración profunda cada día.
- Use filtros de aire de alta eficiencia para partículas (HEPA) para limpiar el aire en su habitación y hogar.
- Lave toda la ropa de cama en agua caliente una o dos veces a la semana para remover el polvo y ácaros de polvo, que pueden desencadenar asma. Use cubiertas antialérgicas para el colchón, las fundas y el colchón de resortes.
- Evite todas las fuentes de humo. Está demás decir: no fume ni se exponga al humo del cigarro.
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“Que tu medicina sea tu alimento, y que tu alimento sea tu medicina”.
Hipócrates
La Buena Medicina.
Fuentes:
Traducción de libro (Bronquitis & Asma)
Traducción de libro (Bronquitis & Asma)
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